Las lágrimas derramadas ya han secado,
Las heridas de amor ya han cicatrizado,
Los escasos besos ya se han borrado,
Que tu boca lanzó como kamikazes.
El tiempo, de verdad que ya ha pasado,
Recuerdos selectos ya han quedado guardados,
El motivo del adiós ya te he perdonado,
Pero no entiendo por qué no te he olvidado.
¿Por qué sigo en las noches llorando?,
¿Por qué pensar en ti es mi peor tortura?,
¿Por qué demonios sigo en ti pensando?,
¿Por qué tu nombre me rompe las costuras?
Es así que tu recuerdo vuelve a derrumbarme,
A ahogarme en llanto, a respirar por la herida,
A anhelar esos besos y del tiempo olvidarme,
De arrepentirme por haber causado la despedida.
